Hernandina

Se originó por mutación espontánea de clementina Fina detectada en 1966 en Picasent (Valencia). El árbol tiene buen vigor y desarrollo.
El tamaño, forma, contenido en zumo y características organolépticas del fruto son similares a los de clementina Fina, pero la plena coloración del fruto la alcanza unos dos meses después. Sin semillas.
Es productiva aunque con ligera tendencia a la vecería. Dabe cultivarse en zonas de recolección tardía y con escaso riesgo de heladas, ya que no resulta comercialmente interesante ofertar estavariedad antes de mediados de febrero.
No es conveniente demorar su recolección más de lo debido, puesto que se puede producir una ligera pérdida de zumo y de acidez que provoca una disminución de las execelentes condiciones organolépticas.